Con las botas puestas
Mi amigo Paquito hubiera cumplido años el pasado 11 de marzo, el próximo octubre se cumplen dos años de su deceso, quizás por excesos, pero causado por un infarto fulminante, con apenas treinta y pico, edad esta peligrosa cuando de alteraciones cardiovasculares se trata.
Murió con las botas puestas, con su Gibson Les Paul colgada del hombro, mientras cantaba sus originales canciones en un local nocturno en San Antonio de los altos, pueblo donde vivía y compartía su música con su trabajo de peluquero.
Acababa de llegar de España, donde estuvo viviendo algún tiempo, pero después de un infortunio sentimental, decidió devolverse a Venezuela, donde todavía vivían sus viejos, gallegos ambos, y sus amigos, lo único que en verdad tenía, por ser hijo único.
Dejó un varón y dos hembras, algunos discos, un amplificador de guitarra Marshall, y un triste olor a peluquerìa entre nosotros, sus amigos y clientes, quienes nos dejábamos cortar el pelo, y contar sus tragedias cotidianas, llenas de un humor negro muy característico de los artistas que nunca abandonan el sueño de cantar sus ideas de ese mundo interior que les pertenece y quieren compartir y difundir.
Lo que no pudo dejar fue su Gibson Les Paul, pues su vieja, decidió meterla con Paquito en la urna, como segurmente hubiera querido él mismo, para irse muy bien acompañado en ese viaje con rumbo desconocido, que el destino planificó para el.
Nos conocimos en los medianos ochenta, en una oportunidad en que fuimos invitados, con el grupo Témpano, a una elección de una reina de belleza en un conocido canal de televisión de Caracas, donde Paquito estaba contratado para peinar y maquillar a las participantes, nos caímos muy bien, y como además de peluquero y maquillador, era músico, lo contratamos para que trabajara con nosotros en las giras, que debido al éxito que teniamos como grupo en ese entonces, realizábamos a lo largo del país.
Se encargó durante algún tiempo de nuestras ochentosas melenas, de maquillarnos en los toques, y de algunas tareas técnicas en el escenario, en una gira que duró alrededor de dos años; luego el grupo se desvandó, pero nuestra amistad sobrevivió en el tiempo.
Paco grabó algunas de sus canciones con un grupo que llamó 'Marqués de Sade', nombre éste que da idea del concepto de las letras y la música que lo influenció: Billy Idol, Alice Cooper, Héroes Del Silencio, Rosendo, entre otros, y su adicción al rock duro y a los sonidos de tono oscuro.
Si la fiesta continúa, en el lugar donde ahora se encuentra, allí esta Paquito con su Gibson Les Paul, haciendo sonar unos oscuros y penetrantes riffs de guitarra distorsionada.
Murió con las botas puestas, con su Gibson Les Paul colgada del hombro, mientras cantaba sus originales canciones en un local nocturno en San Antonio de los altos, pueblo donde vivía y compartía su música con su trabajo de peluquero.
Acababa de llegar de España, donde estuvo viviendo algún tiempo, pero después de un infortunio sentimental, decidió devolverse a Venezuela, donde todavía vivían sus viejos, gallegos ambos, y sus amigos, lo único que en verdad tenía, por ser hijo único.
Dejó un varón y dos hembras, algunos discos, un amplificador de guitarra Marshall, y un triste olor a peluquerìa entre nosotros, sus amigos y clientes, quienes nos dejábamos cortar el pelo, y contar sus tragedias cotidianas, llenas de un humor negro muy característico de los artistas que nunca abandonan el sueño de cantar sus ideas de ese mundo interior que les pertenece y quieren compartir y difundir.
Lo que no pudo dejar fue su Gibson Les Paul, pues su vieja, decidió meterla con Paquito en la urna, como segurmente hubiera querido él mismo, para irse muy bien acompañado en ese viaje con rumbo desconocido, que el destino planificó para el.
Nos conocimos en los medianos ochenta, en una oportunidad en que fuimos invitados, con el grupo Témpano, a una elección de una reina de belleza en un conocido canal de televisión de Caracas, donde Paquito estaba contratado para peinar y maquillar a las participantes, nos caímos muy bien, y como además de peluquero y maquillador, era músico, lo contratamos para que trabajara con nosotros en las giras, que debido al éxito que teniamos como grupo en ese entonces, realizábamos a lo largo del país.
Se encargó durante algún tiempo de nuestras ochentosas melenas, de maquillarnos en los toques, y de algunas tareas técnicas en el escenario, en una gira que duró alrededor de dos años; luego el grupo se desvandó, pero nuestra amistad sobrevivió en el tiempo.
Paco grabó algunas de sus canciones con un grupo que llamó 'Marqués de Sade', nombre éste que da idea del concepto de las letras y la música que lo influenció: Billy Idol, Alice Cooper, Héroes Del Silencio, Rosendo, entre otros, y su adicción al rock duro y a los sonidos de tono oscuro.
Si la fiesta continúa, en el lugar donde ahora se encuentra, allí esta Paquito con su Gibson Les Paul, haciendo sonar unos oscuros y penetrantes riffs de guitarra distorsionada.
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